Mi pareja me ignora: ¿Ignorar es violencia?

Cómo detectar la Ley del Hielo y qué hacer al respecto

Revisado por Lic. Jacqueline Sabaj, Psicóloga
Jacqueline Sabaj, Psicóloga

Revisado y aprobado por
Jacqueline Sabaj, Psicóloga

Jacqueline Sabaj es Licenciada en Psicología especializada en psicoterapia con orientación cognitivo-conductual.


Lea sobre nuestras normas editoriales.
| Actualizado

Joven tapándose las orejas con indiferencia

Por

Psicóloga y comunicadora, especializada en terapia cognitivo-conductual.

Quizás hayas vivido alguna situación donde tu pareja te dejó de hablar sin motivo o de repente te ignoró por completo. Estoy segura que no fue una experiencia agradable. Probablemente sentiste violencia.

Pero, ¿Ignorar es violencia? Sí, dejar de hablar o ignorar a alguien se considera violencia. El silencio es una forma de violencia psicológica, dentro de una relación de pareja, cuando tiene como fin castigar o manipular al otro.

Cuando una persona adopta esta forma de agresión recurre a la indiferencia, al silencio y al desprecio. Debes tener mucho cuidado frente a estas actitudes tóxicas porque pueden tener consecuencias psicológicas graves. Incluso peores que la violencia física.

Un estudio en el cual se le aplicó el trato silencioso a estudiantes concluyó que tiene fuertes efectos en el sentido de pertenencia y la autoestima de la víctima.

En este artículo te voy a explicar por qué ignorar es un tipo de violencia psicológica, qué consecuencias tiene y cómo defenderte.

La Ley del hielo

La Ley del hielo, o trato silencioso, consiste en que tu pareja te ignore. Te excluye de su vida. Se desentiende de ti, sin ninguna explicación. Es una de las herramientas de manipulación más agresivas con las que un abusador cuenta para ejercer presión y dominio sobre las emociones de su víctima.

Mediante el uso de silencios prolongados en momentos específicos dentro de la relación, el abusador se asegura de provocar sentimientos de inseguridad, desesperación e incertidumbre al otro.

Ejemplos de la ley del hielo

  1. Javier y Marta están casados desde hace 6 años. Tienen 2 hijos. Durante los últimos 4 años, Javier le hablaba a su esposa muy poco. A sus hijos les imponía penitencias muy severas, casi sin motivos. Un día se enojó porque Marta le preguntó a dónde iba. En ese momento dejó de hablarle. La ignoraba completamente haciéndola sentir muy mal. Debido a ese ambiente tóxico, los niños comenzaron a tener problemas en la escuela. Intervino una Asistente Social y un Psicólogo. Detectaron el problema, le quitaron la custodia de los hijos a Javier y le impusieron una psicoterapia. Finalmente Marta decidió divorciarse y cortar toda comunicación con él. Ya pasaron 2 años desde la desvinculación. Tanto Marta como sus hijos siguen con apoyo terapéutico.
  2. Te cuento lo que le ocurrió a una pareja de conocidos. Salieron durante varios meses y la relación parecía andar bien. Él es muy cercano a mí. Me contó que ella le controlaba absolutamente todo: horarios, amistades, revisaba su celular, etc. Le exigía que hiciera las cosas a su manera. Ante cualquier negativa ella se enojaba y dejaba de hablarle. Primero fueron unas horas, luego días hasta que desapareció, sin ninguna explicación, por unos 10 días. Mi amigo estaba devastado. Se culpaba. Comenzó con ataques de ansiedad, siempre estaba nervioso, en estado de alerta. Hablamos mucho. Comprendió que él no era culpable de nada. Nadie merece que se le maltrate. Tomó coraje, y decidió ir a terapia. Cortó totalmente con ella. Afortunadamente ya está en plena recuperación.
  3. Un matrimonio muy conocido públicamente. Ella es conductora de televisión y modelo. Él es un futbolista muy importante. Estuvieron casados 9 años. Tienen 2 hijas. Luego de varias discusiones y reiterados e inexplicables alejamientos de él de su hogar, ella decide pedirle el divorcio en buenos términos. Desde ese momento él no le habló más. Le aplicó el trato silencioso. Fue tal el maltrato abusivo que ella recibió que la angustia le provocó un ataque severo de ansiedad ante cámaras, mientras conducía su propio programa. Ya intervino la justicia, médicos y psicoterapeutas. Este ejemplo aún no tiene un cierre. Pero tiene el valor de demostrarnos que este trastorno atraviesa a toda la sociedad, sea cual sea tu posición económica o tu estatus social. 

En relaciones de pareja

Ocurre frecuentemente en las parejas. Tu pareja dejó de hablarte sin darte ningún motivo. Entonces tú comienzas a preguntarte qué fue lo que hiciste mal, por qué este cambio inesperado de comportamiento.

Durante un tiempo prolongado esa persona fue amable, cordial. Seguramente te imponía algunos límites. Sin embargo, hablaban del problema y todo parecía retomar su rumbo. Aún así esos límites se volvieron cada vez mayores. Luego volvían los pedidos, las exigencias y los límites eran cada vez más severos. El círculo cada vez era más pequeño.

Pareja mirando el celular

¿Te diste cuenta que esa persona fingía no escucharte, tomaba distancia y evitaba tu compañía? Entonces es posible que hayas sido víctima de la famosa ley del hielo: una forma de violencia psicológica encubierta.

Quizás recuerdes alguna situación personal en la que tú la hayas aplicado de manera inconsciente. Seguramente desconocías la toxicidad y consecuencias negativas que tiene para la otra persona y para ti mismo.

Un ejemplo de la ley del hielo en la pareja puede ser: “Me siento cansada de discutir con mi pareja. No me entiende. No me da la razón. Dejaré de hablarle hasta que tenga que disculparse…”. Es un recurso fácil para el agresor porque no tiene que hacer nada. Sin embargo, no deja de ser una forma de agresión y por lo general solo trae más problemas.

Si te interesa leer más sobre la Ley del Hielo como forma de abuso psicológico, te recomiendo este recurso.

El silencio como forma de violencia psicológica

El abuso comienza cuando el sujeto se siente incómodo por algún comentario o petición de parte nuestra. Aplica la Ley del Hielo.

Este tipo de personalidad abusiva siempre tiene en su base un trastorno de personalidad narcisista: quiere siempre tener el control. Cualquier petición que hagamos para equilibrar la relación o llegar a un acuerdo será recibida como una amenaza directa a su frágil y endeble integridad.

El trato silencioso provoca dolor, frustración y ansiedad. Llega a ser más agresivo que la violencia verbal o física.

El silencio como violencia pasiva para manipular y castigar

El enojo expresado indirectamente, de manera pasivo-agresiva, provoca una alta irritabilidad y una actitud manipuladora que confunde y humilla al otro.

La actitud pasivo-agresiva es aquella en la que no te agredo verbalmente, ni físicamente. No deja rastros de la agresión.

El peor pecado hacia nuestros semejantes no es odiarlos, sino tratarlos con indiferencia; esto es la esencia de la humanidad.

William Shakespeare

Si bien el comportamiento pasivo-agresivo es una característica de varias afecciones de la salud mental, no se considera una enfermedad mental en sí misma.

Etapas del silencio manipulador como violencia psicológica

La violencia psicológica del trato silencioso se puede observar en etapas.

El violento primero pide: “¿me traes tal cosa?” o “¿me llevas a tal lugar?”.

Si respondes que ahora no puedes o sencillamente no tienes ganas, entonces lo exige y lo ordena.

Si aún así no lo logra pasa a la presión y a las amenazas: “si no lo haces te abandonaré o pediré el divorcio”.

Al no obtener lo que desea aplica la Ley del Hielo. Ignora al otro. No le habla, no lo mira, no le responde. Lo hace “desaparecer”.

Se convierte en pura y dura frialdad emocional, en indiferencia. El receptor se siente denigrado, desorientado, no entiende el motivo de tal castigo.

La Ley del Hielo puede tener consecuencias psicológicas permanentes en la víctima por lo que es importante detectarla y actuar temprano.

Consecuencias de la Ley del hielo:

  • Estrés. La incertidumbre al no entender lo que está pasando, le provoca estrés a la víctima. Se pregunta “¿qué hice para que ocurra esto?”
  • Ansiedad. A medida que se prolonga el castigo, las dudas y la inseguridad se apoderan de la víctima que no logra contener la ansiedad.
  • Angustia. El estrés y la ansiedad pueden provocar dificultades para dormir y, como consecuencia de eso, cansancio permanente que lleva a fallar en la toma de decisiones. La víctima sufre la angustia de un castigo que no cesa, haga lo que haga.
  • Hipersensibilidad. La hipersensibilidad se apodera de esa persona, que llora ante el más mínimo estímulo. Se vuelve asustadiza y puede sobresaltarse por el sonido de un teléfono o el ladrido de un perro.
  • Depresión. Todos estos daños que la aplicación de la Ley del Hielo puede provocar a la psiquis de la víctima, pueden llevar a un cuadro de depresión, base de todas las enfermedades mentales.

Cómo reconocer el maltrato psicológico

El trato silencioso es apenas una de las múltiples maneras de ejercer violencia psicológica. Tal vez sea la más difícil de detectar y de probar, pero deja huellas para toda la vida.

Es muy probable que la víctima deba recurrir a psicoterapia con apoyo farmacológico.

Quizás tengas la duda de si sufres maltrato psicológico. La idea de esta sección es ayudarte a identificar estas situaciones de violencia por silencio mediante algunas preguntas:

¿Deja de hablarte inesperadamente? ¿Lo hace por un tiempo prolongado? ¿No responde a tus preguntas? ¿Te ignora como si no existieras? ¿Se compromete a no repetirlo pero vuelve a aplicarte la Ley del Hielo?

También hay señales que te alertan y que te pueden ayudar a prevenir esta peligrosa situación: ¿Te controla demasiado? ¿Revisa tu teléfono celular? ¿Quiere que elimines tus cuentas de las redes sociales o te pide las contraseñas? ¿Te separa de tus amigos o de tu familia? ¿Te exige que cambies hábitos?

¡Atención! Si reconoces estas actitudes, es posible que tu pareja sea un maltratador psicológico, un abusador. En tal caso te recomiendo buscar ayuda profesional. Un psicólogo podrá ayudarte a identificar estas personalidades y elaborar un plan de acción.

¿Cómo defenderse del maltrato psicológico?

La vía más sana es siempre la comunicación con tu pareja. Si eres víctima del trato silencioso, puede sea útil llevar adelante una terapia de pareja. Sin embargo, sabemos que eso es algo que depende de la voluntad de ambos.

Relacionado: Mi pareja me ignora: Cómo responder ante la indiferencia

Si esto no es posible, podrías intentar amablemente revertirlo tomando las riendas de la situación. Para eso deberías cortar tú la comunicación y darle un plazo, tras lo cual podrían sentarse a hablar de lo que está ocurriendo.

Durante el período que tú determines (48 horas, una semana), deberías eliminar todo contacto con tu pareja de manera que, al restablecerlo, el único tema a discutir sea por qué te aplica la Ley de Hielo y cómo hará para corregirlo.

Lamentablemente debo decirte que, en la mayoría de los casos, eso no tendrá resultados permanentes. Dependiendo de la gravedad de la situación, a veces la mejor solución para tu bienestar es la separación total.

Debes saber que toda negociación con este tipo de persona siempre es falsa. Podrá decirte muchas veces “voy a intentar corregirlo”, “estoy seguro de poder cambiar”, “no lo volveré a hacer”.

Te puedo asegurar que responderá a ese compromiso durante un tiempo y luego volverá a aplicar la Ley del Hielo, porque es un narcisista.

La misma conducta reiterativa que se produce en el maltrato físico o verbal, se repetirá en este otro tipo de violencia psicológica: durante un período corto desaparece el abuso y puede parecer que todo está bien.

Sin embargo, volverá a caer. El ciclo se repite y te transforma en la víctima de su enojo, porque esa es la única forma que conoce de relacionarse.

Conclusión

Ignorar al otro es un tipo de violencia psicológica cuando tiene como fin castigar o manipular. Dejar de hablarle a alguien de forma repentina y por un tiempo prolongado es una forma de maltrato psicológico denominada trato silencioso, o ley del hielo. 

Este tipo de manipulación degrada, humilla, invisibiliza. Uno no comprende el motivo y siente una profunda indiferencia y desprecio. Sin golpes ni gritos, hace sentir muy mal y desorienta por no comprender cómo se llegó a este punto.

A las primeras señales de un iceberg, huye. Recuerda que en el Titanic sólo se salvaron los rápidos.

Preguntas relacionadas

¿Por qué los narcisistas hacen el tratamiento silencioso? 

Los narcisistas hacen el tratamiento silencioso porque no toleran que les digan que no. Sienten ira por no poder manipular la situación. El enojo les puede llevar a reaccionar de diferentes maneras. Una de ellas es aplicar la Ley del Hielo.

¿Qué pasa cuando ignoras a un narcisista?

Cuando ignoras a un narcisista te estás beneficiando. Te debes controlar para no responder con un ataque, que es la reacción que él busca. Tu respuesta es su combustible, lo que lo empodera y lo llena de satisfacción. Es la trampa en la que no debes caer.

Siguiente lectura: Los 21 tipos de violencia más comunes que enfrentas a diario

Ver Fuentes

Mente.org revisa todas las fuentes para asegurar su alta calidad. Realizamos un fact-check de todos los artículos contra las últimas publicaciones científicas en la materia. Lea nuestro proceso editorial para saber más sobre los esfuerzos de Mente.org por producir contenido preciso y confiable.

Fuentes

  1. Kipling D. Williams, Wendelyn J. Shore, Jon E. Grahe. The Silent Treatment: Perceptions of its Behaviors and Associated Feelings. Octubre 1998. https://doi.org/10.1177/1368430298012002.
  2. Baumeister, R. F. , & Tice, D. M. Anxiety and social exclusion. Journal of Social and Clinical Psychology. 1986. 165-195.

Por

Psicóloga

Adriana Rivas es Licenciada en Psicología y cuenta con más de treinta años de experiencia en psicología y comunicación. Como psicóloga graduada en 1981, se formó en distintas corrientes y se especializó en el área cognitivo conductual. Realiza terapias cortas y efectivas aplicadas a las distintas problemáticas. Se ha dedicado al periodismo tanto en radio como en televisión.

Selección editorial

Ver más ›

Seleccionado por los editores de Mente.