¿Los psicópatas y asesinos toman leche? Mito y verdad

Un inocente vaso de leche en las manos de un villano o un psicópata se ha transformado en una imagen recurrente en películas. Esto no quiere decir que la imagen sea fiel a la realidad.

¿Es verdad que psicópatas y asesinos toman leche? No existe conexión entre los psicópatas o asesinos y una preferencia por la leche. Se asocia a la leche con asesinos y otros villanos debido principalmente a elecciones artísticas en la cultura moderna. El objetivo es generar un contraste en el espectador asociando la inocencia de la leche con actos violentos.

Tres ejemplos responsables por introducir la imagen de la leche como símbolo de la violencia en la cultura popular son las películas: 

• Sospecha (1941) de Alfred Hitchcock
• La naranja mecánica (1971) de Stanley Kubrick 
• Bastardos sin gloria (2009) de Quentin Tarantino

Cada una asocia la leche a villanos de forma diferente pero con el mismo objetivo. El objetivo de estos cineastas es generar un contraste entre una imagen que asociamos con la inocencia y la infancia, con actos de extrema violencia. Ver a un asesino tomando un vaso de leche y no por ejemplo un whisky, genera un desencaje entre lo que esperamos y lo que vemos. Esto potencia el rechazo por el villano.

La leche y la violencia

El 24 de enero de 1989 el asesino en serie Ted Bundy es ejecutado tras ser condenado con la pena de muerte en Florida, Estados Unidos. Como última cena se le otorga un bistec de carne, huevos a la sartén, tortillas de papa, tostadas con manteca, jugo de naranja y un vaso de leche.

Ted Bundy fue responsable del secuestro, violación y asesinato de 30 mujeres antes de ser arrestado el 16 de agosto de 1975. Cuando el caso salió al aire causó un impacto enorme en la sociedad estadounidense. Su persecución y condena fueron el tema de conversación de los principales diarios y cadenas televisivas.

Uno de los tantos debates generados durante y después del caso de Ted Bundy giraba en torno a su aparente “normalidad”. ¿Cómo es posible que un padre casado con un trabajo y una buena educación pueda ser capaz de actos tan horrendos?

El hecho de que la última bebida de este asesino en serie fuera un vaso de leche no causó mayor revuelo que cualquier otro detalle de la época ni tomó mayor relevancia. 

Sin embargo, la razón por la que este caso horrorizó de tal forma a la sociedad se encuentra en la discrepancia de lo que se espera y la realidad. La aparente normalidad de Ted Bundy generó una desconfianza general en el entorno que antes era normal.

El objetivo de un villano en una película tomando leche es muy similar. Asociamos a la leche con la lactancia, el mundo infantil y con la inocencia.

El significado de la leche en el cine

En 1941 Alfred Hitchcock estrena sospecha, un thriller ubicado en Inglaterra sobre una mujer que comienza a sospechar que su esposo es un asesino y planea matarla. Como en todas sus obras el suspenso es central en la historia de la película generando un ambiente tenso y peligroso para la protagonista.

Lo interesante de esta película es que comienza como cualquier otra película romántica de la época. Nuestra protagonista, Lina, se enamora de un carismático extraño en un tren llamado Johnnie Aysgarth. Se casan sin la aprobación de sus padres y zarpan en una bella luna de miel por Italia y Francia.

No es hasta que la nueva pareja se aclimata en su casa moderna y lujosa, que comenzamos a sospechar que Johnnie no es quien decía ser. Vende objetos preciados de Lina sin avisar y oculta información importante. La trama avanza y los secretos empeoran, Lina sospecha ahora que su esposo es responsable de dos asesinatos y planea próximamente asesinarla.

La gran diferencia con otras películas de la época es como Hitchcock trae el miedo y el suspenso al hogar, el lugar en el que bajamos nuestra guardia y nos sentimos seguros. 

En uno de los momentos más tensos de la película el personaje del esposo sube lo que sospechamos es un vaso de leche envenenado para asesinar a Lina en su momento más indefenso.

Se conoce a Hitchcock como el padre del suspenso por lo que no es una locura asumir que la elección de cualquier otra bebida no tendría el mismo efecto que un vaso de leche.

La leche mezcla aún más el sentimiento de hogar con el de peligro, genera una sensación de duda en los objetos y acciones más inocentes y confiables.

¿Por qué toman leche en la naranja mecánica?

La naranja mecánica, dirigida por Stanley Kubrick, es una de las películas más controversiales que jamás se haya filmado. En ella una pandilla violenta comete una serie de crímenes y actos sádicos contra sus víctimas inocentes. La joven pandilla, tras un día de actos particularmente violentos, visita un bar donde cada uno pide un vaso de leche. Esta escena rápidamente se convirtió en un ícono del cine de la época.

En la película “La naranja mecánica”, la pandilla toma leche para marcar el contraste entre lo que vemos y lo que esperamos. También funciona como un recordatorio de que los personajes que vimos cometer estos terribles crímenes son jóvenes.

Es importante recordar que el objetivo original de la leche es el de la lactancia. Es el primer alimento de cualquier mamífero. Un bebé necesita leche materna o fórmula para sobrevivir.

Un vaso de leche está asociado con el crecimiento sano y con la crianza. Al ser una parte clave de la infancia, ocupa también un lugar en los primeros recuerdos y experiencias de cualquier ser humano.

Generar este lazo tan súbito entre un joven sano y nuestro protagonista genera un rechazo más grande. Otra vez la leche es usada como un método de acercar actos horrendos con la vida diaria y borrar la línea que nos separa de esta violencia.

Bastardos sin gloria

Nuestro último ejemplo es Bastardos sin gloria, a película de Quentin Tarantino estrenada en el 2009. Esta trata sobre un grupo paramilitar de judíos que se encuentra en Francia, durante la segunda guerra mundial, luchando contra la Alemania nazi.

En la primera escena conocemos a nuestro principal villano, el coronel Hans Landa de la SS (Christoph Waltz), quien busca una familia judía en la casa de un granjero francés. 

Desde el minuto que aparece Hans Landa muestra su habilidad para hablar y dominar la conversación, forzando al granjero francés a revelar dónde se encuentran las personas que está resguardando sin ejercer violencia física y sin alertar a la familia judía que sabe dónde se esconden.

La escena termina con el coronel señalando que la familia se esconde bajo el piso de madera a un escuadrón de soldados que disparan contra los tablones matando a todos menos a la hija menor. 

Lo interesante que trae a la mesa Bastardos sin gloria en esta escena es usar el vaso de leche como un símbolo de poder. La leche como símbolo de inocencia muestra el lado más sádico del personaje y cómo usa una actitud inocente y relajada mientras planea la matanza de una familia entera.

Usa su poder para que el granjero francés se vea forzado a ofrecerle el vaso de leche y Hans pase de ser una fuerza invasora a un invitado que prueba los productos de su granja.

Conclusión

No existe un vínculo entre la psicopatía y la leche. No pudimos encontrar ninguna estadística que muestre que los psicópatas o asesinos consuman esta bebida más que el resto de la población. Tampoco existen razones para creer que la leche cause daños en la psiquis humana. 

La imagen se coló a la cultura popular a través del cine. Varios directores eligieron la leche como la bebida predilecta de sus peores villanos.

Lo interesante de esto no se encuentra en la conducta de los psicópatas, sino en lo que esperamos de ellos. La leche en el cine es usada como un vínculo entre personas malvadas y la vida diaria del espectador.

En los comienzos del cine los villanos vivían en castillos lejanos, cuevas en la mitad del bosque o planetas a miles de años luz. Eran asesinos, vampiros u hombres lobos. Separados de nuestras realidades y fácil de distinguir de nuestros vecinos.

La leche se encuentra en la mayoría de los refrigeradores del planeta. Mostrarla como la bebida predilecta de los villanos genera una sensación de incomodidad. Nos hace pensar que cualquiera podría ser un asesino o un psicópata.

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